Catalina, una pequeña de 10 años que sufrió lesiones faciales severas debido a una explosión durante un experimento escolar en Rancagua, localidad del partido de Pergamino, se encuentra estable. Actualmente respira sin asistencia y muestra una evolución positiva en su estado de salud, tras haber sido trasladada al Hospital Garrahan en un vuelo sanitario el viernes pasado. Allí, un grupo multidisciplinario perteneciente a siete especialidades quirúrgicas la operó durante más de 11 horas.
Detalles del Accidente
El suceso ocurrió el jueves 9 de octubre, cuando una maqueta de volcán explotó y provocó un traumatismo craneofacial severo a Catalina. Un fragmento de metal impactó su maxilar superior izquierdo, adentrándose hacia la cavidad intracraneal y quedando a solo dos milímetros de la arteria carótida, lo que puso en riesgo su vida.
Daniel Buamscha, jefe del área de Terapia Intensiva, informó que “aunque está fuera de peligro, sigue bajo una estricta vigilancia debido a la seriedad de sus lesiones. Ha respondido de manera favorable a la cirugía y los medicamentos. El domingo se realizó un procedimiento de limpieza y el martes se suturó toda la herida facial. Actualmente respira sin ayuda y responde a instrucciones simples.”
Proceso de Recuperación
En su primera operación, Catalina permaneció en la Unidad de Cuidados Intensivos, donde fue monitoreada continuamente y recibió soporte hemodinámico y sedación analgésica para asegurar su bienestar y control del dolor, según explicó el médico.
Para los días siguientes, los expertos planifican un despertar “gradual y controlado” de la pequeña para evaluar posibles secuelas. “La principal meta fue salvar la vida de la niña, lo que se ha conseguido; aunque la fase siguiente es complicada y podrían surgir contratiempos”, indicaron.
El incidente ocurrió durante la noche del jueves en el Instituto Comercial Rancagua. Catalina estaba en la primera fila, emocionada por presenciar el final del evento anual de ciencias: la simulación de la erupción de un volcán.
Una estudiante se situó frente a la maqueta y encendió una combinación de azufre y carbón con sales, todos contenidos en dos tubos metálicos. El fuego se descontroló, causando finalmente una explosión que dispersó materiales incandescentes en todas direcciones.
Aparte de Catalina, quien resultó más afectada fue una docente que necesitó ser operada en el Hospital Provincial San Felipe, ubicado en San Nicolás. Los demás heridos, que incluyen 11 adultos y 4 menores, presentaron lesiones de diversa gravedad y recibieron el alta médica poco después del incidente.
