La nieve se forma cuando el aire congela el agua. El vapor de agua en las nubes se transforma en cristales de hielo que se unen y caen al suelo en forma de copos. En ciertas condiciones atmosféricas, la nieve puede ser creada y permanecer en la superficie por días. Esto es clave para los centros de esquí, ya que la falta de nieve provoca que los turistas retrasen sus visitas o cancelen sus reservas.
La nieve artificial es la herramienta utilizada por los centros de esquí para asegurar la disponibilidad y calidad de nieve, especialmente en temporadas de sequía donde las nevadas son poco comunes.
En lugares como el cerro Catedral, Las Leñas, cerro Bayo y Chapelco, es común ver cañones de nieve. Estos dispositivos producen nieve al operar en temperaturas bajo cero, mezclando aire y agua comprimidos para crear hielo.
Una vez generada, la nieve es compactada mediante máquinas especiales que se encargan de alisar y mantener las pistas de esquí en buen estado.
Mecanismo de Producción
Para iniciar la producción de nieve artificial, es necesario alcanzar una temperatura de -2,5 °C. En condiciones de humedad baja, esto puede lograrse a algo más de 0 °C, pero cuando la humedad es alta, se requieren temperaturas más bajas.
En la década de 1950, los ingenieros Art Hunt, Dave Richey y Wayne Pierce, desarrollaron el primer cañón de nieve, que fue probado en una estación de esquí artificial en Nueva York. El uso habitual de este método comenzó a expandirse a partir de los años ’70 en centros de esquí.
En el valle de Las Leñas, al sur de Mendoza, los cañones de nieve funcionan todos los días durante esta temporada de escasez nívea.
Debido a la gran afluencia de turistas durante las vacaciones y la disponibilidad limitada de pistas, el centro de esquí de Malargüe tuvo que suspender ciertas promociones y el pase para principiantes entre el 19 de julio y el 2 de agosto.
Las Leñas ha desarrollado un sistema de nieve artificial que cubre varios sectores claves, incluyendo el retorno de Neptuno, Venus I, Eros I y II, y las bases de Minerva y Vulcano.
El sur de Mendoza cuenta con un equipo especializado que usa agua como materia prima para la fabricación de nieve cuando las condiciones de humedad y temperatura son apropiadas.
Las máquinas producen nieve al dividir el agua en minúsculas partículas que, al ser pulverizadas y entrar en contacto con el aire, se congelan y caen en forma de copos.
La infraestructura de Las Leñas incluye una sala de bombas a 1.000 metros de la base con un reservorio de 5.000 m3. Este sistema se nutre de 7.500 metros de tuberías subterráneas y cuenta con hidrantes cada 50 metros para conectar los cañones.
La Nieve en Bariloche
El lunes, el cerro Catedral, el centro de esquí más destacado de Bariloche, recibió nieve. Este fenómeno fue bienvenido ya que coincidió con las vacaciones porteñas y bonaerenses.
Desde el comienzo del invierno, el principal centro de esquí de Argentina no ha ofrecido la típica imagen nevada que buscan los turistas.
Para compensar, los operadores de Catedral han instalado 40 cañones de nieve que operan durante las bajas temperaturas nocturnas, suministrando nieve artificial a la sección Magic Carpet 3, donde los principiantes aprenden a esquiar o practicar snowboard.
En las pistas más elevadas, los esquiadores experimentados aguardan con ansias más nevadas naturales, especialmente durante esta semana llena de visitantes argentinos y brasileños.
Martín Lago, presidente de la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica de Bariloche, ha estimado una ocupación del 80% en julio y del 70% en agosto.