Entre los muchos argentinos que optan por trabajar en el exterior, se encuentran numerosos médicos que desean continuar sus carreras profesionales fuera del país. Desde este martes, el proceso se ha vuelto más sencillo, ya que ahora se garantiza la validez internacional de sus títulos.
El Ministerio de Capital Humano anunció que no será necesario recertificar sus títulos en el lugar donde decidan residir, permitiéndoles trabajar “de manera directa”.
¿En qué consiste esta nueva medida?
En cuanto al alcance de esta simplificación administrativa, aún hay varias incógnitas por resolver debido a lo reciente del anuncio. ¿Implica que los médicos podrán simplemente llegar a otro país, colocarse su uniforme y comenzar a ejercer? Aquí exploramos los cambios reales.
Lo fundamental es entender que esta medida aplica a los médicos graduados de universidades, tanto públicas como privadas, que poseen la certificación de la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (CONEAU).
Homologación y especialidades
Argentina logró este reconocimiento global gracias a un proceso de certificación realizado por la misma comisión ante la Federación Mundial de Educación Médica (WFME). El ministerio, liderado por Sandra Pettovello, comunicó que se trata de un “reconocimiento institucional de alcance internacional”.
Esta modificación en el reconocimiento de títulos ofrece a los egresados de estas carreras acreditadas la posibilidad de practicar la medicina en países que exigen esta certificación, como en los Estados Unidos. Allí, es un requisito impuesto por la Comisión Educativa para Graduados Médicos Extranjeros, encargada de evaluar a los médicos para su ejercicio profesional.
Los responsables de esta decisión explicaron a Clarín que el certificado pretende garantizar que los programas de medicina cumplen con estándares internacionales. Esto les da un reconocimiento académico que podría simplificar algunos trámites, aunque cada país define las condiciones específicas para ejercer, lo que es distinto al reconocimiento académico.
Por ejemplo, si en un país europeo hay un examen de habilitación, los médicos argentinos deberán presentarlo o cumplir con lo que cada nación establezca.
No existen regulaciones globales estandarizadas para la práctica médica. Mientras algunos países solo requieren el reconocimiento del título académico, otros pueden imponer estrictos procedimientos antes de permitir el ejercicio de la profesión.
Este cambio genera dudas sobre qué tan “directo” será el ejercicio profesional en otros países, si deben pasar exámenes o procedimientos previos de habilitación.
Desde la Confederación Médica de la República Argentina (COMRA), comentaron a Clarín que aún no conocen cómo será la implementación, pero creen que “sí agilizará los trámites”.
A pesar de estas incógnitas, se celebra el cambio en el sector. Hasta ahora, solo Colombia y Chile habían obtenido este reconocimiento en la región.
La certificación permanecerá válida para médicos argentinos hasta el 31 de enero de 2035, pero estará sujeta a un control anual, tal como indica la CONEAU, para asegurar el continuo cumplimiento de los criterios establecidos.
No obstante, este sello de confianza no es “absoluto”. Según el certificado de la WFME, solo se refiere a las carreras de grado y no a los posgrados.
Por tanto, se certifica internacionalmente el título de médico, no las especialidades.
En palabras de Sandra Swieszkowski, docente universitaria y miembro de la Sociedad Argentina de Cardiología (SAC), “Formarse como cardiólogo es un posgrado, y esta nueva normativa solo aplica a carreras de grado, aunque podría expandirse. Si es así, un médico argentino con un título de cardiólogo también podría ser reconocido en el exterior”.
En Argentina, no todas las especialidades se consiguen mediante posgrados. Mayormente, se obtienen a través de residencias, permitiendo así un “certificado de especialista”. Para obtener el título de especialidad, se requiere completar el posgrado universitario junto con la residencia, detalla Swieszkowski.
Este reconocimiento, aunque elimina la necesidad de recertificar, no representa la eliminación total de otros requisitos en el exterior.
Finalmente, el proceso que cada médico argentino deba seguir para trabajar en el exterior varía según el país de destino, ya que no hay una regulación universal al respecto, y cada nación tiene sus propias normativas y procedimientos para la habilitación de títulos extranjeros.
