Transformaciones en el turismo de Villa Gesell
Este verano, el atractivo de Mar del Plata para los jóvenes, especialmente aquellos que viajan en grupos de amigos, se consolidó de manera más firme que nunca. Aproximadamente el 50% de la temporada fue impulsada por visitantes de entre 18 y 35 años, gracias a una amplia gama de ofertas de entretenimiento. Este fenómeno puso de manifiesto el cambio en otros destinos costeros, como Villa Gesell.
Alteraciones en la vida nocturna
Los hábitos nocturnos en Villa Gesell han cambiado: es más común ver familias paseando por el centro que grupos de jóvenes buscando aventuras nocturnas. Las opciones para los jóvenes se limitan a desplazarse hasta Pueblo Límite en taxi, o quedarse en bares y restaurantes del área central, como Origen, que no es exactamente una discoteca.
Impacto económico y decisiones políticas
La oferta de entretenimiento se ha reducido tras el cierre de Dixit. De las tres discotecas originales en Gesell, solo Pueblo Límite sigue operando; Le Brique cerró después del trágico incidente que involucró a Fernando Báez Sosa. Carlos López, presidente de la Cámara de Empresarios de Discotecas y Bares de la Provincia de Buenos Aires (CEDIBBA), expresa su preocupación por las pérdidas económicas que estos cambios han ocasionado.
“El desafortunado evento con Fernando trajo consecuencias serias. Esperamos justicia para los responsables. Pero Villa Gesell ha tomado un giro hacia acoger a un público más adulto, guiado por la administración local”, explica López en su conversación con Clarín.
El desplazamiento del turismo joven
Históricamente, Villa Gesell era un destino preferido por los jóvenes. Con múltiples discotecas, bares y eventos, la ciudad estaba diseñada para ellos. Sin embargo, muchos han trasladado su preferencia a lugares como Pinamar y Mar del Plata. Las medidas de seguridad tras el incidente han generado un ambiente menos acogedor para los visitantes jóvenes.
En la actualidad, Pueblo Límite opera solamente los fines de semana, aunque antes permanecía abierto todos los días de enero. La asistencia ha disminuido considerablemente en comparación con temporadas pasadas cuando la asistencia era mucho mayor.
Jorge Cocco, representante de la Asociación de Hoteles, Restaurantes, Confiterías y Afines de Villa Gesell, relata cómo el turismo ha cambiado hacia un enfoque más familiar. La ciudad se ha adaptado, con establecimientos ajustándose para recibir a este tipo de visitantes, un cambio notable en los últimos cuatro años. Aunque la ocupación hotelera sigue siendo considerable, ha disminuido en comparación con otros destinos como Pinamar o Mar del Plata.
En las playas de Villa Gesell, se observa un predominio de familias. Jóvenes como Agostina y Morena, que pasan unos días en la ciudad, notan este cambio y la ausencia de la vibrante vida nocturna que una vez caracterizó al área. Agostina comenta sobre la amabilidad de la gente y la naturaleza familiar del lugar actual, mientras que los jóvenes encuentran que la fiesta se ha desplazado a otros sitios.
