Ajustes en las tarifas de las principales entidades de salud tras la última inflación registrada
El debate se intensifica en las redes cuando los usuarios se cuestionan el por qué de los aumentos en las tarifas de salud que exceden el último índice de inflación, que se ubicó en 2,4%. La disconformidad se generaliza ante ajustes que, para algunos, parecen injustificados.
Información obtenida por Clarín revela que varias prepagas han oficializado sus incrementos tarifarios para el mes de enero. Entre ellas, el Hospital Italiano lidera con un 3,9%, seguido por Omint con un 3,3%, Medicus con un 3%, Prevención Salud con un 2,98%, y Swiss Medical con un 2,9% (que sería un 2,4% con copagos). Les siguen el Hospital Británico con un 2,7%, Galeno con un 2,6%, y Medifé con un 2,4% (2% con copagos). Se observa una tendencia a la reducción en las tasas de incremento en comparación con el mes anterior. Sin embargo, no se ha revelado aún la actualización de tarifas de OSDE, ya que esta empresa ajusta sus precios a mes vencido. A la fecha de esta publicación, ni Sancor Salud ni Accord Salud -entre las prepagas más importantes del país- han comunicado sus ajustes tarifarios.
Entidades como el Hospital Italiano y el Británico, distinguidas por su naturaleza no lucrativa y su enfoque en la comunidad, aclaran que su modelo difiere del de las tradicionales prepagas. Subrayan su compromiso por ofrecer atención médica de vanguardia y única en el país, aunque los aumentos tarifarios puedan generar insatisfacción entre los usuarios.
Afiliados comenzaron a recibir notificaciones sobre los nuevos aumentos poco después de que INDEC publicara el índice de precios al consumidor de noviembre. Los avisos se emitieron al finalizar una semana en la que el gobierno acusó a siete prepagas de formar un cartel, según la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC).
Justificación de los incrementos por parte del sector salud
Los representantes de las prepagas argumentan que los costos del sector salud superan el promedio de inflación debido a varios factores específicos. Hugo Magonza, líder de la Unión Argentina de Salud, destaca que el índice de inflación afecta no solo en términos de precio sino también en la frecuencia de uso del servicio. Remarca que el número de consultas médicas per cápita ha incrementado significativamente en las últimas décadas.
Magonza explica que el aumento en la complejidad de los tratamientos médicos, con innovaciones tecnológicas como la resonancia magnética y tratamientos de alto costo para enfermedades raras, contribuye a la subida de los costos. También menciona el envejecimiento de la población y las enfermedades degenerativas, que requieren terapias avanzadas cuyos precios son fijados por monopolios.
Conversaciones entre la Superintendencia de Servicios de Salud y algunas prepagas reflejan las tensiones entre las necesidades empresariales y las expectativas gubernamentales. Aunque se realizaron ajustes en algunos casos, las empresas sostienen que reducir las tarifas por debajo de sus cálculos comprometería la calidad del servicio.
Los reclamos del público, como el de Arturo Neuberger, un afiliado de Sancor Salud, reflejan el malestar general. Neuberger expresa su preocupación sobre cómo los aumentos obligan a muchos a cancelar sus servicios sin que haya consideración por parte de las entidades, a pesar de su retórica de cuidado y atención hacia sus clientes.