Nadie hubiera imaginado que el parto se adelantaría, especialmente en el lugar donde ocurrió. Una mujer argentina regresaba a su hogar en Bariloche desde Chile. En el cruce fronterizo Cardenal Samoré, dio a luz a su hijo.
El Sorpresivo Nacimiento en el Autobús
Mientras el autobús de la empresa Andesmar llegaba al punto fronterizo para los controles habituales, la situación se descontroló. “¡La bolsa se rompió, está viniendo!”, gritó desesperada la mujer embarazada. Ante el caos y los gritos de los pasajeros, el conductor pidió a todos los presentes que descendieran del vehículo. La madre, ubicada en el último asiento, dio a luz sola mientras el personal de Aduanas y Gendarmería, que brindaba apoyo, observaba atónito.
Los Primeros Auxilios y la Espera de la Ambulancia
Jennifer Rivas, de 29 años, había aprovechado unos días de descanso con su pareja Martín y su hija de dos años para visitar a amigos en Osorno, Chile. En la semana 36 de gestación, su médico había calculado que el parto sería a principios de agosto. “Quizás las curvas y contracurvas del trayecto aceleraron el proceso”, comentó Sandra, una oficial de Aduanas que ayudó durante la emergencia. Ella relató que, a pesar de todo, el resultado fue excelente, con Jennifer manejando la situación prácticamente sola, mientras otros aportaban toallas y mantas para abrigar al recién nacido.
Dirigiéndose a Martín, Jennifer le dijo: “Tú cuida a la niña, déjame a mí”. Genaro llegó al mundo a las 13:15 horas, pesando 2,300 kilos. “El bebé lloró al instante, lo que nos calmó, y Jennifer inmediatamente lo amamantó. Fue un momento emocionante y único, especialmente considerando que estábamos lejos de cualquier centro urbano”, relató Sandra, quien seguía conmovida. Otro funcionario de Aduanas, con conocimientos veterinarios, sugirió cerrar las ventanas del autobús y abrigar a la madre y al bebé para conservar su temperatura.
La ambulancia desde Villa La Angostura alcanzó el lugar antes de las dos de la tarde. Con la ginecóloga Fanny Moyano y el pediatra Mauro Taibo a bordo, se procedió a atender a madre e hijo y trasladarlos al Hospital Regional de La Angostura. “Estaba de guardia cuando nos notificaron desde la frontera. Al llegar, encontramos a la madre y al bebé en el autobús, siendo amamantado”, expresó Taibo, quien lleva doce años viviendo en la Patagonia.
El vehículo de emergencias llegó poco después de haberse producido el nacimiento, transportando a ambos al hospital para recibir atención médica.
Taibo detalló: “Lo primero fue cortar el cordón umbilical para detener la pérdida de sangre. Notamos que el bebé presentaba hipotermia y estaba menos reactivo debido a que las toallas en las que estaba envuelto estaban húmedas. Dada su prematuridad, al nacer en la semana 36, faltando una semana para el término. Tras abrigarlos adecuadamente, ambos fueron llevados a la ambulancia”. Fue la primera vez que Taibo atendía un parto fuera de un hospital.
Rumbo a La Angostura, “solicitamos que prepararan la sala de parto en el hospital para verificar los niveles sanguíneos y la servocuna, que asegura el control térmico para recién nacidos. Ya pasado el mediodía, todo está bajo control, y una ambulancia los trasladará a Bariloche, su lugar de residencia”.
PS