Un Nuevo Comienzo para Pupy
La elefanta africana Pupy, el último gran mamífero en el Ecoparque de Buenos Aires, finalmente ha sido transportada al Santuario de Elefantes de Brasil (SEB), en Mato Grosso. Este lugar está especialmente diseñado para brindar un entorno apropiado y semi-libertad a elefantes rescatados del cautiverio. Este viernes marcó su esperada llegada a su nuevo hogar.
Transformación del Ecoparque de Buenos Aires
El traslado de Pupy simboliza el fin de una era en el proceso de evolución del antiguo zoológico de la ciudad, que ahora se centra en la conservación y el bienestar animal. A lo largo de los años, este lugar ha completado con éxito 1.018 reubicaciones de especies a santuarios y reservas. Esta fue la última de una majestuosidad tal, poniendo término a la presencia de grandes animales en el parque. Pupy, quien llegó al Ecoparque en 1993, tiene aproximadamente 35 años.
El Viaje hacia una Nueva Vida
La travesía de Pupy fue de aproximadamente 2.700 kilómetros desde Buenos Aires hasta Chapada dos Guimarães, próxima al santuario. Para cuidar de su bienestar, se planificaron paradas específicas durante el camino.
Pupy fue acompañada durante todo el trayecto por un equipo especializado del Ecoparque y del Santuario. Se decidió no usar sedantes para mantener su calma natural.
Bienvenida al Santuario
Al arribar al Santuario, se abrió cuidadosamente la caja de transporte y Pupy inspeccionó su nuevo entorno. Se le permitió salir a su ritmo, ofreciendo comida favorita como cañas y sandía, y un refrescante baño con manguera. Numerosos espectadores siguieron el evento a través de una transmisión en vivo proporcionada por el Ecoparque.
El Santuario de Elefantes de Brasil, el primero de su tipo en América Latina, está administrado por Global Sanctuary for Elephants (GSF) en colaboración con Elephant Voices. El propósito es ofrecer un entorno seguro y natural para elefantes que han sufrido cautiverio, posibilitándoles retomar comportamientos naturales y socializar bajo óptimas condiciones.
El santuario actualmente alberga a cinco elefantas asiáticas: Mara, Guillermina, Rana, Maia y Bambi. Debido a las diferencias entre las especies, Pupy, al ser africana, no convivirá con ellas. Así, el santuario está preparado para mantener a cada grupo en zonas separadas.
Pupy sigue una dieta bien balanceada que incluye forraje, gramíneas, avena, y una variedad de frutas y verduras, consumiendo entre 70 y 80 kilos diarios. Se fomenta su actividad natural ofreciéndole estos alimentos de formas creativas como bloques congelados o dentro de objetos jugables.
El santuario cuenta con un doble sistema de cercas y un perímetro de seguridad que impide el ingreso de personas y asegura la protección de los animales.
El Proceso de Adaptación
El traslado de Pupy se había intentado previamente en marzo, pero fue exitoso en esta ocasión tras varios ensayos. Aunque estaba habituada a la caja de transporte, se ponía nerviosa al ser cerrada. Se decidió entonces posponer el viaje para mejorar su preparación. En las semanas siguientes, se intensificaron las prácticas de familiarización.
En el año 2024, Kuky, otra elefanta compañera, falleció antes de ser trasladada al santuario, dejando a Pupy como la única elefanta en el Ecoparque. Este hecho ha añadido un componente emocional al transporte ya completado. El espacio en el que Pupy solía vivir está ahora completamente desocupado.