Amenazas en redes sociales generan preocupación
En la provincia de Chubut, un colegio de carácter religioso tomó la decisión de activar un protocolo de seguridad por prevención. La acción fue necesaria después de que aparecieran en diversas plataformas sociales mensajes amenazantes dirigidos a los estudiantes del lugar, prometiendo que cada uno recibiría “una bala”.
Intervención de las autoridades locales
La situación crítica tuvo lugar en el Colegio Salesiano Deán Funes, ubicado en la parte norte de Comodoro Rivadavia. Durante la noche del martes, una serie de mensajes violentos motivó la rápida acción y respuesta de las autoridades policiales y la Brigada de Investigaciones de la región.
La directora del colegio, Edith Eva Sauer, compartió con el diario Jornada que alrededor de las 20 horas fueron alertados de que sus redes sociales estaban siendo usadas para difundir amenazas.
Estos mensajes, detectados en las plataformas oficiales del colegio como Instagram y Facebook, exhibían un nivel de agresividad que llevó a la dirigencia escolar a formalizar una denuncia policial de inmediato.
Las amenazas, concretamente, mencionaban la intención de acercarse al colegio para hacer daño a los estudiantes, indicando que sufrirían y serían atacados.
Impacto en la comunidad educativa
El resultado de la difusión de estos mensajes fue un clima de temor entre los miembros de la comunidad educativa. Muchas familias decidieron tomar acción, y algunos padres acudieron al colegio para expresar su preocupación, mientras que ciertos estudiantes mostraron reticencia a ingresar al recinto.
A pesar de la grave situación, las actividades en el colegio continúan con normalidad, pero ahora operan bajo estrictas normas de seguridad. Sauer informó que se ha hecho un esfuerzo por concientizar a los alumnos, instándolos a reportar cualquier amenaza o situación sospechosa de inmediato a un adulto cercano.
Mientras tanto, las investigaciones para identificar al responsable de las amenazas permanecen sin éxito, ya que el autor ha logrado mantener su identidad oculta. Según Sauer, el perfil de quien emitió los mensajes fue desactivado poco después de que intentaran capturar evidencia.