Italia finalmente ha sancionado un controvertido decreto-ley que complica la gestión de la ciudadanía italiana desde fuera del territorio para los descendientes de ciudadanos italianos. Esta noticia resulta desafortunada para miles de argentinos que aspiraban a obtener el ansiado pasaporte italiano, el cual permite residir en Europa y entrar a Estados Unidos sin necesidad de visa.
Aprobación Legislativa y Cambios en la Ley
El 28 de marzo, Antonio Tajani, ministro de Relaciones Exteriores de Italia, sorprendió al anunciar que el gobierno liderado por Giorgia Meloni aprobó un decreto similar a un decreto de necesidad y urgencia en Argentina. Este decreto recibió aval tanto de la Cámara de Diputados como del Senado. Además, se presentó un proyecto de ley relacionado que será examinado próximamente por el parlamento italiano.
Impacto en los Descendientes de Italianos
El decreto está ya en efecto, limitando la tramitación de la ciudadanía a aquellos hijos o nietos de italianos que no se han naturalizado en otro país. Aunque no se tiene claro cuántos argentinos se ven afectados, en 2024 se reconocieron 30.000 ciudadanías bajo el principio del ius sanguinis, que concede la nacionalidad por descendencia.
Reclamación de Ciudadanía en Italia
El reciente decreto-ley permite solicitar la ciudadanía en Italia, pero para ello los interesados deben residir en el país por un periodo de dos años. Así, al identificar a un antepasado que pueda transmitir la ciudadanía, es necesario trasladarse a Italia. Los ciudadanos argentinos pueden entrar como turistas por 90 días sin visa. En ese tiempo, deben solicitar un permesso di soggiorno (permiso de residencia), que les da el derecho de residir y trabajar legalmente, no requiriendo radicarse en la localidad donde vivieron sus ancestros.
Al cumplir los dos años de residencia, el proceso de solicitud de la ciudadanía puede iniciarse, lo que posteriormente permite gestionar el pasaporte italiano. A diferencia de lo que se llegó a plantear, no es necesario presentar un examen de idioma italiano.
Más Allá del Trámite Administrativo
El gobierno sostiene que la intención no es cerrar las puertas a los descendientes legítimos, sino animar a aquellos que deseen asentarse y trabajar en Italia. Meloni busca evitar que el pasaporte italiano se use para mudarse a otros países europeos, un caso frecuente entre argentinos que optan por vivir en España.
Antonio Tajani, al presentar el decreto, expresó que ser ciudadano italiano es un compromiso serio, no un mero trámite para facilitar el turismo de compras en Estados Unidos, a donde los italianos puede viajar más fácilmente.
Posibilidad de Reclamación Judicial
Ricardo Merlo, del Movimiento Associativo Italiani all’Estero, sugiere que puede haber una vía judicial para reclamar la ciudadanía desde Argentina. Defiende que el derecho a ser ciudadano existe desde el nacimiento, no desde el inicio del trámite, y propone que se podrían presentar recursos individuales en tribunales italianos para que reconozcan el derecho de ius sanguinis.
Aquellos interesados en seguir este camino necesitarían contratar abogados en Italia que trabajen en colaboración con estudios en Argentina. Este proceso tiene costos relacionados con honorarios y tasas judiciales, y dependerá del fallo del juez el que primen argumentos de descendencia sobre el decreto vigente.