Reflexiones sobre la Edad y el Tiempo
En Punta del Este, en el elegante hotel Jean Clevers, Graciela Alfano se presenta con un llamativo vestido blanco que resalta su figura. “Elegí lo mejor que tenía para esta entrevista”, comenta al recibirnos. La tarde avanza y el calor es intenso, pero Graciela, con más de un millón de seguidores, se muestra llena de energía. “Podrían pasarme malas situaciones, pero siempre tengo una actitud positiva y optimista. Jamás me verás lamentándome o actuando como víctima”, asegura al iniciar la conversación.
Con 72 años, afirma que vive su mejor etapa. “Hablen lo que quieran, pero esta es la mejor época de mi vida. Desmitifiquemos la idea de que uno llega a esta edad encorvado y sin energía. No es así. Yo represento una nueva forma de longevidad, en la que se puede amar y disfrutar de los nietos. Disfruto cada día, viajo, trabajo y cuido de mi salud”, expresa, subrayando su bienestar físico. “Me gusta mostrar que, a mi edad, se puede estar en plenitud”.
Libertad y Cuidado Personal
Graciela transmite una actitud despreocupada respecto al paso del tiempo. “Amo cumplir años. ¿Importaría si te dijera que tengo 100 o 20 años? Realmente no. Estoy en un momento excelente; tengo la libertad que me permite mi experiencia. Estoy emocionalmente estable, nada ni nadie me desequilibra. Esta etapa de mi vida es simplemente maravillosa”, afirma con convicción.
Cuando se le menciona que no todos pueden someterse a intervenciones quirúrgicas, responde: “De acuerdo, pero he hecho todo lo que se puede hacer para mejorar mi apariencia. No me mantengo solo con lechuga. Si algo me mejora, lo hago”. Sobre el miedo al dolor físico, comenta: “Claro que hay dolor, pero me encanta cambiar mi cuerpo. Es casi una obligación de mi trabajo”.
Sobre la “obligación” de pasar por el quirófano, explica: “Es parte de mi trabajo lucir espectacular, y aunque duele, no temo al dolor. Si necesito cirugía de nuevo, lo haré sin dudar. Disfruto cuidarme y cambiar mi apariencia”, dice con orgullo y sinceridad.
Conversadora y expresiva, Graciela no evita ningún tema, ni siquiera cuando se trata de escándalos personales. Visitando esta popular ciudad, fue testigo de un incidente amoroso con su pareja, que se convirtió en un espectáculo para la TV. “Tuve que soltarlo todo tras la separación, pero no me detengo a lamentarme”, comenta sobre su proceso de superación personal.
Reflexiona sobre su recorrido profesional, convirtiéndose en una emblemática figura de redes sociales con una trayectoria de cinco décadas. “No es fácil ser Graciela Alfano, pero he logrado marcar tendencia y mantenerme vigente”, declara orgullosamente mientras habla de nuevas oportunidades como una posible serie basada en su vida.
Fiel a su esencia, Graciela mantiene una alta autoestima y no teme compartir sus desafíos personales, incluyendo un susto significativo de salud. “Un diagnóstico de cáncer me llevó a explorar mi espiritualidad y a tomar decisiones cruciales, siempre buscando el entendimiento de mí misma y de mi entorno”.
Su rutina en Punta del Este es ejemplo de disciplina: “Empiezo el día muy temprano con ejercicios y una alimentación rigurosa, todo parte de mantener mi figura”. Al hablar de su familia y experiencias pasadas, recalca el apoyo de sus hijos y de su actitud transformadora para seguir adelante.
Con una visión clara, anuncia sus deseos de seguir expandiendo su marca y comunicar mensajes poderosos. “Me he reinventado muchas veces y seguiré haciéndolo. La marca Graciela Alfano sigue siendo un emblema de fuerza y transformación”, concluye, llena de vitalidad y planes para el futuro.
