Nuevo sistema de créditos universitarios: detalles sobre su implementación y propósito

El pasado miércoles, el Ministerio de Capital Humano informó que a partir de enero de 2027 comenzará a funcionar el Sistema Argentino de Créditos Académicos Universitarios (SACAU). Este nuevo esquema, similar a modelos aplicados en ciertas naciones europeas y en EE.UU., no solo reconocería las horas de clase presenciales, sino también el tiempo que los estudiantes dedican de forma independiente a sus materias. A este esfuerzo adicional se le ha empezado a llamar “horas asincrónicas”, las cuales comprenden el tiempo invertido en tareas, proyectos, o en la preparación para evaluaciones.

Este anuncio representa un cambio significativo para la educación superior en Argentina, especialmente para las carreras nuevas que aspiren a obtener acreditación oficial a partir de 2027. Según el comunicado oficial, a menos que se decida extender la implementación del SACAU hasta por dos años, estas nuevas carreras serían las primeras en adoptar el sistema. Aunque las carreras ya establecidas no están obligadas a alterar su estructura, desde la Secretaría de Educación se espera que estas paulatinamente se integren, similar a lo acontecido con la acreditación de la CONEAU, comentó Alejandro Álvarez, subsecretario de Políticas Universitarias, al diario Clarín.

Para aquellos que han seguido las deliberaciones en el Consejo de Universidades, esta información aunque relevante, no es totalmente inesperada. La iniciativa de modernizar el sistema universitario argentino hacia un esquema de créditos y equivalencias más actualizado, que facilite la movilidad de estudiantes entre diferentes instituciones a nivel nacional e internacional, tomó forma inicialmente en octubre de 2023. Por aquel entonces, el titular del Ministerio de Educación era Jaime Perczyk y el Presidente de Argentina, Alberto Fernández.

Aunque en ese momento se aprobó la idea de un nuevo sistema, no se llegó a un acuerdo sobre su implementación exacta. Lo que ahora se anuncia, realmente se definió en diciembre de 2024, pero la noticia fue relegada debido a la cantidad de comunicaciones que el Ministerio de Capital Humano, dirigido por Sandra Pettovello, debe gestionar.

Detalles del nuevo modelo de créditos

Si bien es probable que la introducción del nuevo sistema de créditos genere polémica, Álvarez expresó su satisfacción por este avance. Destacó que mediante el consenso alcanzado en la reunión 274 del Consejo de Universidades, se estableció cómo operaría este nuevo método de valoración. De acuerdo con sus declaraciones, permitirá a los estudiantes acumular lo que se denominarán Créditos de Referencia del Estudiante (CRE).

A través de un comunicado, el Ministerio de Capital Humano especificó que “cada crédito académico corresponderá a entre 25 y 30 horas de dedicación académica”. Esto incluye no solo las horas de clase presenciales, sino también aquellas que los estudiantes dedican fuera del aula, según lo establecido por cada institución.

Por ejemplo, cada asignatura de una carrera específica, creada después de 2027, tendrá un valor numérico en términos de créditos, como 10, 20 o la cantidad que corresponda. “Dentro de un mismo campo del conocimiento, los créditos se podrán intercambiar automáticamente”, adelantó Álvarez.

Además, este sistema contribuirá a que las universidades puedan desarrollar programas de estudio más flexibles, interdisciplinarios y abiertos, incorporando diversas estrategias pedagógicas y modalidades de enseñanza. Se prevé que estos programas tengan un promedio de 60 créditos anuales.

Las instituciones que gozan de mayor prestigio tendrán que adaptarse para aceptar alumnos provenientes de otras universidades con programas demostrablemente equivalentes. Esto podría facilitar a los estudiantes completar parte importante de sus carreras en una universidad y trasladarse para finalizar sus estudios en otra. La idea es fomentar acuerdos y unificar criterios para que el sistema de crédito sea exitoso.

La realidad detrás del tiempo de estudio

La propuesta de implementar créditos busca también hacer más realista la duración de los estudios universitarios. Muchas veces se afirma que ciertas carreras tienen una extensión de cinco años, aunque en la práctica los alumnos suelen tardar más debido a las horas de estudio autónomo que no se contabilizan formalmente.

Álvarez explicó que cada universidad tendrá la responsabilidad de evaluar y aplicar estos créditos a sus materias, teniendo en cuenta si el contenido es más teórico o práctico. Esto permitirá a los estudiantes que deseen realizar estudios avanzados o complementarios tener un reconocimiento más armónico de sus trayectorias educativas, así facilitando la articulación entre diferentes niveles educativos.

Quizás también te interese:  Aprendizajes del juicio Pélicot: análisis sobre consentimiento y sumisión química en el ámbito judicial

El subsecretario comentó que debido a las diferencias socioeducativas y económicas entre regiones de Argentina, desarrollar un esquema de valoraciones uniforme es un desafío considerable. Para estos casos se concibió el Sistema de Aseguramiento de Calidad, el cual garantizará la calidad académica conforme a los estándares de la CONEAU. Aunque todavía está en ajustes, se espera que sea anunciado oficialmente pronto.

Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos y para mostrarte publicidad relacionada con sus preferencias en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Más información
Privacidad