Segunda Ballena Encontrada Muerta en una Semana en la Costanera
Este lunes, un nuevo caso de ballena fallecida fue reportado en la Costanera Norte, en Buenos Aires, marcando el segundo incidente similar en apenas una semana.
Ubicación y Detalles del Hallazgo
El ejemplar, que mide alrededor de seis metros de longitud, fue descubierto sin vida cerca del Parque de la Memoria, un lugar que alberga un monumento dedicado a las Víctimas del Terrorismo de Estado, y muy próximo a Tierra Santa.
Aunque hasta las últimas horas del lunes las labores de remoción no habían comenzado, el animal seguía visible flotando cerca de la orilla.
Otro Caso Reciente en Vicente López
La semana pasada, el miércoles, se encontró otro cetáceo muerto gracias a un pescador en el kilómetro 18 del canal costero ubicado en Vicente López. Al llegar al lugar, el personal de Prefectura verificó que el animal ya no estaba con vida y que se encontraba encallado en la zona de La Lucila.
En ambos casos, las ballenas eran claramente visibles, varadas a poca distancia de la costa, con sus aletas hacia el cielo y en un estado avanzado de descomposición.
En Vicente López, el personal de Defensa Civil y la Patrulla Policial establecieron un perímetro de seguridad y coordinaban el operativo para la extracción del animal.
La ballena había estado muerta por dos días, y según fuentes del medio Clarín, la corriente la empujó hacia la costa.
Marcela Junín, quien es especialista en mamíferos y hábitats marinos en la Fundación Azara, señaló al diario Clarín que, aunque este tipo de sucesos no son únicos, tampoco son frecuentes en el Río de la Plata.
Junín mencionó que es más común que en estas regiones las ballenas minke o sei encallen, por lo que posiblemente una de las dos sea la encontrada en Vicente López.
Explicó también que la ballena minke se alimenta exclusivamente en la Antártida, principalmente de kril, mientras que la sei consume pequeños peces y sigue a los bancos desde Río Negro al sur o en Chubut, aunque generalmente no se acerca al estuario.
Asimismo, comentó que en esta temporada realizan rutas migratorias que van del sur de Río de Janeiro, en Brasil, hasta la Antártida, y usualmente lo hacen en grupos de 3 o 4, aunque pueden emigrar solas.