Un grupo de cuatro jóvenes transgénero de la Ciudad de Buenos Aires ha presentado una demanda de amparo contra el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) implementado por el presidente Javier Milei hace dos semanas. Este decreto limita el acceso de menores de 18 años a terapias hormonales y bloqueadores hormonales.
El rescate de derechos en peligro
La acción legal, promovida por el Frente Nacional Orgullo y Lucha, incluye a adolescentes de 14, 15 y 16 años. Estos jóvenes buscan obtener una medida cautelar que les permita seguir sus tratamientos médicos, evitando así los efectos adversos que podrían surgir de una interrupción repentina en su desarrollo y bienestar. La jueza Cecilia Gilardi de Negre, del Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Contencioso Administrativo Federal N° 8, está a cargo del caso.
Un desafío a la normativa internacional
Organizaciones como 100% Diversidad y Derechos y la Comunidad Homosexual Argentina (CHA) critican la modificación del DNU a la Ley de Identidad de Género, considerándola un retroceso en términos de derechos humanos. Argumentan que esto viola el principio de no regresión y progresividad que defiende la Constitución Nacional, además de tratados internacionales, al limitar el acceso de adolescentes trans a tratamientos hormonales.
Impugnación al DNU presidencial
El decreto presidencial reforma artículos cruciales de la Ley de Identidad de Género, que permite a menores de edad la opción de tratamientos hormonales y procedimientos quirúrgicos para modificar su cuerpo. Ahora, a los médicos les está prohibido recetar estas terapias a personas trans menores de 18 años.
El jurista Andrés Gil Domínguez sostiene que el DNU 62/2025 es inválido ya que no cumple con las condiciones constitucionales de necesidad y urgencia, además de violar los derechos fundamentales a la identidad de género y contra la discriminación. Subraya que la justicia debe actuar rápidamente para salvaguardar estos derechos y el futuro de los adolescentes afectados.
Repercusiones en la juventud trans
Organizaciones de salud, como la Sociedad Argentina de Pediatría y expertos internacionales, han alertado sobre los peligros de interrumpir repentinamente los tratamientos hormonales, lo cual puede tener efectos negativos serios tanto físicos como psicológicos, tales como depresión severa y riesgo elevado de suicidio.
La Ley de Identidad de Género se fundamenta en el principio de autonomía progresiva, reconociendo el derecho de los adolescentes a tomar decisiones sobre su salud y su cuerpo. Sin embargo, el reciente decreto fue promulgado sin respetar los procedimientos constitucionales, usurpando las funciones legislativas y violando la separación de poderes.
“Reconocemos la importancia de que los adolescentes trans tengan acceso a servicios de salud integral para asegurar su bienestar. La prohibición impuesta sólo ocasionará daños significativos en su desarrollo”, afirma Valeria Paván, miembro de la CHA.
Finalmente, Natalia Bertazzoli de la Asociación Civil Agrupación de Familias de niñes y adolescentes TTNB Munay, expresó: “Confiamos en que nuestros hijos podrán continuar con sus tratamientos, como es su necesidad y deseo. No permitiremos un retroceso en derechos humanos que derive en despojarles de acceso vital a la salud y dignidad”.
