Operativo de Seguridad en la Feria
En una reciente intervención, la Policía Federal llevó a cabo un operativo en la conocida feria de La Salada, situada en el camino de la Ribera. Durante la operación, una cantidad significativa de productos fue confiscada de los puestos que se encuentran cerrados. Estos cierres ocurrieron después del arresto en mayo de Jorge Castillo, según la causa manejada por el juez Luis Armella.
Protestas de los Comerciantes
Los vendedores afectados, que han estado exigiendo la reapertura del sitio para continuar con sus negocios, protagonizaron una manifestación frente al área de la feria. Mientras tanto, algunos han decidido exhibir sus productos en las cercanías de Ingeniero Budge, utilizando las calles para mostrar su mercancía en perchas y con carteles, dado que sus locales permanecen cerrados.
Cierre Judicial de la Feria
La feria más grande de indumentaria del país sigue clausurada desde el 22 de mayo de 2025, por decisión judicial. Esta acción sigue a la detención de Jorge Castillo, apodado “Rey de La Salada”, junto a otras 15 personas relacionadas con él. Se les acusa de delitos como lavado de dinero, contrabando y evasión de impuestos.
Impacto Laboral y Respuestas del Gobierno
Se calcula que el cierre de las tres ferias principales, llamadas Urkupiña, Punta Mogote y Ocean, ha dejado sin empleo a casi 50,000 personas. En respuesta, el gobernador Axel Kicillof, a través de su cuenta de X, manifestó: “Desde la provincia de Buenos Aires estamos coordinando con el Gobierno nacional, el municipio de Lomas de Zamora y la fiscal Cecilia Incardona para normalizar la situación de las ferias de La Salada y asegurar el empleo de los trabajadores”.
Alternativas Propuestas
Las cooperativas dentro del predio han mantenido cortes y quejas junto al Puente La Noria, demandando la reanudación de sus actividades laborales, aunque todavía esperan una respuesta concreta. El Gobierno nacional ha comunicado su inquietud por el tema y sugiere una alternativa social, que consistiría en reubicar a los comerciantes en diferentes áreas del municipio o en localidades adyacentes.
No obstante, la mayoría de los vendedores tienen sus productos aún almacenados en los galpones de la feria o bajo confiscación de las autoridades, lo que les impide trasladar sus mercancías a otras zonas para su venta.