Acuerdo Alcanzado en las Clínicas Privadas
A partir de este jueves, las clínicas privadas ya no mostrarán las paredes cubiertas con carteles de protesta por aumentos salariales. Las partes enfrentadas finalmente lograron un consenso, estableciendo nuevas escalas salariales para los meses de mayo, junio y julio, incrementando en un 1,5% cada mes.
Detalles del Incremento Salarial
Este aumento supera ligeramente el 1% mensual que inicialmente buscaba el Gobierno. Según el documento al que accedió Clarín, el convenio tendrá una vigencia de un año, desde el 1 de febrero de 2025 hasta el 31 de enero de 2026.
En consecuencia, los enfermeros, tanto de planta como de consultorios, percibirán un salario básico de 972.571,38 pesos en mayo, 987.159,95 pesos en junio, y 1.001.967,35 pesos en julio. Los camilleros ganarán 841.165,60 pesos en mayo, 853.783,08 pesos en junio y 866.589,83 pesos en julio.
Beneficios Adicionales Acordados
El acuerdo también incluye una asignación no remunerativa única de 54.718 pesos, para todos los trabajadores contemplados en el Convenio Colectivo de Trabajo N°122/75. Esta cantidad será entregada en septiembre, en conmemoración del Día del Trabajador de la Sanidad.
Adicionalmente, los empleados recibirán una suma no remunerativa mensual de 25 mil pesos en mayo, 40 mil en junio, y 60 mil desde julio en adelante hasta que se negocie un nuevo acuerdo. Las empresas han garantizado que no habrá sanciones ni descuentos para los trabajadores que participaron en las recientes protestas gremiales.
Este acuerdo fue formalizado por la Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad Argentina (FATSA), representada por Héctor Daer; la Asociación de Clínicas, Sanatorios y Hospitales Privados de la República Argentina (Adecra) con Jorge Cherro, y la Confederación Argentina de Clínicas, Sanatorios y Hospitales (Confeclisa), liderada por José Luis Sánchez Rivas. También participaron la cámara de geriátricos (AAEG) y las entidades prestadoras de salud (Cepsal).
La resolución llega tras intensos meses de conflicto y protestas visible en múltiples clínicas y hospitales privados, en una campaña promovida por el sindicato bajo el lema “Con empresarios miserables no hay salud”.
El acuerdo surge en un contexto crítico del sistema privado de salud, con el Gobierno supervisando los aumentos de las cuotas de las prepagas para que se ajusten a la inflación o incluso sean menores. Las prepagas y obras sociales son quienes abonan a las clínicas por sus servicios, permitiéndoles pagar al personal médico.
La cláusula 7 del acuerdo especifica que, si alguna empresa enfrenta problemas económicos para cumplir con los pagos acordados, podrá negociar con el sindicato afiliado a FATSA correspondiente, una alternativa de pago. La situación económica no es homogénea en todos los centros de salud.