Este miércoles, se publicó en el Boletín Oficial un decreto que permite a los civiles adquirir y poseer armas semiautomáticas bajo un “control especial”. Esta medida pone fin a la restricción que existía desde 1995 durante el gobierno de Carlos Menem.
Nuevas regulaciones para el acceso a las armas
El Decreto 397/2025, a cargo del presidente Javier Milei, la ministra de Seguridad Patricia Bullrich y el jefe de Gabinete Guillermo Francos, define los nuevos parámetros para la compra y tenencia de estas armas.
El documento oficial señala: “Se establece un régimen de autorización especial para la adquisición y posesión de armas semiautomáticas con cargadores extraíbles similares a fusiles, carabinas o subametralladoras de asalto, de calibre superior al .22 LR, solicitadas por legítimos usuarios de armas de fuego.”
Contexto histórico y ajustes necesarios
Hasta ahora, tales armas habían sido exclusivas para fuerzas armadas, conforme a la normativa dada por el decreto 64/95, que también fundó la ANMAC (Agencia Nacional de Materiales Controlados) para regulaciones específicas.
El actual Gobierno ve la necesidad de “revisar los sistemas actuales para controlar estas armas semiautomáticas”, señalando que la ANMAC ha sido “amplia” en la entrega de licencias y autorizaciones.
El decreto sugiere que los organismos competentes deben encontrar “un equilibrio adecuado entre la adquisición y transferencia de estas armas de fuego y las precauciones necesarias para la seguridad pública”.
Para adquirir un arma de este tipo, los solicitantes deben “demostrar su uso deportivo y cumplir con las condiciones que la ANMAC establezca”
Esta decisión es parte de una serie de medidas que busca flexibilizar la adquisición y posesión de armas. En 2024 se redujo la edad mínima de 21 a 18 años para obtener la Credencial de Legítimo Usuario de armas, paso fundamental para comprar un arma legalmente.
El mes pasado, se introdujo el proceso de “Tenencia Express”, que facilita la obtención de permisos de tenencia de armas para civiles y fuerzas de seguridad que compren armas o municiones en armerías.
Aunque aún se requiere presencia física para ser reconocido como usuario legítimo, se anticipa que el trámite será digital en breve. Esto requerirá completar un formulario, presentar un examen psicofísico, demostrar habilidades de tiro, no tener antecedentes penales y pagar una tasa de cinco mil pesos.
Según estimaciones gubernamentales, además de aquellas armas con licencias vencidas, unas 800 mil armas ilegales están en circulación en el país.
Oficialmente, se reconoce en Argentina a 260.348 usuarios legítimos con 739.124 armas registradas, promediando tres por persona. Sin embargo, hay 479.225 permisos caducados con 814.608 armas alguna vez registradas cuyo paradero es incierto.
D.D.