Un paraíso patagónico para la celebración de Máxima y su familia
Recientemente, la familia real neerlandesa se encuentra en Argentina, disfrutando de una estancia única en Bariloche tras su visita a Buenos Aires. El refugio elegido para estas fechas tan significativas es el hotel Estancia Pilpicura, una joya propiedad de la reina Máxima Zorreguieta junto a sus hermanos Juan e Inés.
Antes de reunirse con su familia, Máxima Zorreguieta se encontraba en Buenos Aires, para luego viajar todos juntos desde Ezeiza hacia Santa Cruz en un avión privado. Su estadía en El Calafate precedió a la llegada a Bariloche, donde la familia real se instaló en la estancia, ubicada cerca del río Pichileufú, rodeada por la belleza natural de la precordillera de Río Negro.
Alojamiento de reyes en plena Patagonia
El hotel en la estancia Pilpicura destaca por su estilo, donde el lujo se mezcla con la simplicidad, ofreciendo apenas cinco habitaciones diseñadas bajo la premisa del minimalismo. Estas habitaciones, pensadas para una experiencia VIP, permiten a sus huéspedes disfrutar del entorno natural sin distracciones.
La reserva en este exclusivo hotel, gestionado desde 2009 por Marcela Cerruti, tía de la reina Máxima, no se realiza por habitación sino que se alquila la totalidad de la estancia a grupos por períodos mínimos de una semana. Para ello, es necesario completar un formulario detallado para recibir un presupuesto personalizado, ya que el costo varía según cada grupo e incluye opciones de alojamiento, comidas y actividades al aire libre.
Dedicada a ofrecer una experiencia auténtica de Patagonia, la estancia dispone de 3.000 hectáreas de paisajes naturales que incluyen montañas, estepas y aguas cristalinas. Su restaurante, especializado en gastronomía gourmet patagónica, suma a la propuesta exclusiva del lugar.
En cuanto al alojamiento, las habitaciones, decoradas con sencillez, priorizan la funcionalidad y la conexión con el entorno. Destacan suelos de madera, colores claros y tejidos artesanales. Externamente, el hotel cuenta con áreas preparadas para disfrutar del aire libre, incluyendo espacios para almuerzos y cenas al aire libre con detalles de lujo.
Para completar la experiencia, la estancia ofrece una variedad de actividades como pesca con mosca, trekking, cabalgatas, y la oportunidad de participar en tareas rurales típicas, todo complementado con la posibilidad de avistar la fauna local. Esa combinación de comodidades, actividades al aire libre y atención personalizada hace de la Estancia Pilpicura el lugar ideal para conectar con la naturaleza y la cultura patagónica.
Así, entre celebraciones y el esperado reencuentro con Carmen Cerrutti, madre de Máxima, para el Año Nuevo, la estancia se convierte en el escenario perfecto para unas vacaciones prolongadas de la familia real de Países Bajos, que se prevé extendidas hasta mediados de enero.