Recientemente, el Gobierno ha nombrado a Gastón Morán como nuevo director del Instituto Nacional de Medicamentos (INAME), integrante de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT). Esta medida se tomó tras la destitución de Gabriela Mantecón Fumadó, por no haber emitido la alerta urgente necesaria ante la situación del fentanilo adulterado, que hasta ahora ha ocasionado 96 fallecimientos.
Perfil del nuevo director
Gastón Morán es un profesional graduado de la Universidad de Morón, con una maestría en Políticas Públicas de la Universidad Austral y un posgrado en Farmaeconomía por la Universidad Isalud. Su formación incluye una residencia en la ANMAT, donde se especializó en control de calidad de medicamentos.
Entre los años 2011 y 2016, Morán desempeñó diversos roles dentro del organismo: trabajó como analista en microbiología, jefe de comercio exterior del INAME, jefe de proyectos, y se desempeñó como coordinador técnico de los institutos nacionales.
Trayectoria y responsabilidades anteriores
Anteriormente, Gastón Morán fue presidente de la Agencia Nacional de Laboratorios Públicos, subsecretario de Medicamentos e Información Estratégica y subsecretario de Atención Primaria e Integración de los Sistemas de Salud. Desde septiembre de 2022, lideró la Dirección de Evaluación y Control de Biológicos y Radiofármacos en ANMAT.
La destitución de Mantecón Fumadó, quien había sido nombrada durante la gestión de Carla Vizzotti, se hizo efectiva el pasado miércoles. Fuentes oficiales indicaron que la decisión se debió a que no se dio un “trámite urgente” a un informe fundamental acerca del laboratorio Ramallo, responsable de la fabricación del fentanilo adulterado.
Según informaciones del organismo, la ex directora habría pasado por alto un documento que describía graves incumplimientos en los laboratorios investigados. Se mencionó que solo ella y algunos subordinados tuvieron acceso al informe.
Investigaciones en curso
Mientras tanto, continúa un sumario administrativo interno -confidencial- y una investigación judicial, con el objetivo de determinar si hubo fallas o responsabilidades internas en INAME.
Con el avance del proceso judicial sobre el fentanilo adulterado, se busca “esclarecer responsabilidades sin interferencias”, especialmente tras las detenciones del empresario Ariel García Furfaro y otros nueve directivos vinculados a los laboratorios HLB Pharma y Ramallo.
El juez federal de La Plata, Ernesto Kreplak, que lleva el caso, ordenó la captura del empresario García Furfaro, quien se entregó el pasado miércoles a la Policía de Seguridad Aeroportuaria.
El empresario se halló en el centro de la investigación debido a irregularidades, fallos en las Buenas Prácticas de Fabricación (BPF) de medicamentos, y a su historial problemático. Anteriormente, cumplió una condena por tentativa de homicidio.
Entre los detenidos se encuentran Hernán y Diego García Furfaro, hermanos cómplices en las actividades de la empresa, Laboratorios Ramallo, y otras entidades farmacéuticas. También fue arrestada su madre, Nilda Furfaro, quien presidió una de las compañías.
El juez Kreplak ordenó también el arresto de Javier Tchukran, director general de ambos laboratorios, así como de los directores técnicos Carolina Ansaldi y Víctor Boccaccio de Ramallo, y José Antonio Maiorano de HLB. Asimismo, se impuso la misma restricción al presidente de Ramallo, Horacio Tallarico, y al director suplente, Rodolfo Labrusciano.
La remoción de Mantecón Fumadó se oficializó a través de la Resolución 2415/2025, firmada por el ministro de Salud, Mario Lugones, y publicada en el Boletín Oficial. Esta normativa limitaba su nombramiento transitorio desde el 20 de agosto.
Nombrada con carácter transitorio en diciembre de 2022 mediante la Decisión Administrativa 250/2023, Mantecón Fumadó debía permanecer por un periodo inicial de 180 días hábiles. No obstante, su administración fue objeto de controversia por la gestión en el caso del fentanilo adulterado.
El nombramiento de Gastón Morán representa el intento del Gobierno por reestructurar este organismo esencial para el control de medicamentos en medio de una de las crisis sanitarias más serias de los últimos tiempos. De acuerdo a fuentes oficiales, el INAME “no ha cumplido en años recientes con su papel principal: verificar la calidad y la seguridad de los medicamentos y alertar sobre posibles riesgos”.