Recate de un Recién Nacido en Circunstancias Inesperadas
El jueves en la ciudad de Neuquén, una acción rápida y coordinada permitió el rescate seguro de un recién nacido tras ser inesperadamente atrapado dentro de un auto. La situación comenzó cuando, accidentalmente, el vehículo se bloqueó con el niño adentro, tras cerrarse las puertas automáticamente con las llaves dentro. Afortunadamente, la alerta al Comando de la Policía fue inmediata, asegurando un desenlace favorable.
Detalles del Incidente y Respuesta de Emergencia
Todo ocurrió alrededor de las 11.30 a.m., en la intersección de las calles Córdoba y Rivadavia de la capital neuquina. El bebé, quien acababa de ser llevado por sus padres a un control médico, quedó atrapado dentro de un Renault Clio blanco, equipado para su seguridad en un asiento para infantes. Su madre, que se había ausentado brevemente a una farmacia cercana, y su padre, que estaba por sacarlo del automóvil para su cita médica, se enfrentaron a la inesperada cerradura del vehículo.
La reacción de los padres fue de inmediata comunicación con las autoridades, mientras que los oficiales del Comando de la Policía arribaron rápidamente en bicicleta para asistir en la situación. Frente al evidente nerviosismo y preocupación de los padres, se propuso y autorizó la ruptura de uno de los vidrios del auto, seleccionando cuidadosamente el más distante al menor para minimizar riesgos.
El jefe de la policía local, Comisario Néstor Catalán, manifestó a medios de comunicación que la pronta intervención fue crucial, dadas las buenas condiciones climáticas y la sombra que cubría al vehículo, factores que contribuyeron a que el bebé se mantuviera en buenas condiciones a pesar del encierro. La serenidad del menor fue notable, manteniendo la calma y la curiosidad por el entorno durante el operativo.
Tras el rescate, se llamó a una ambulancia del Sistema Integrado de Emergencias de Neuquén para una revisión completa, asegurando que el niño estaba en perfecto estado antes de ser devuelto a sus padres. El incidente concluyó sin cargos para los progenitores, reconociendo el evento como un infortunio accidental sin consecuencias graves.