Un sujeto fue arrestado tras desatar destrucción con un pico en una oficina de la Empresa Provincial de Energía (EPE) ubicada en San Jorge, una ciudad de Santa Fe. Todo comenzó cuando llegó a reclamar debido a un aparato que al parecer se había dañado.
Incidente en plena oficina
El suceso tuvo lugar en la intersección de San Luis y Rivadavia. De acuerdo a informes de la prensa local, el individuo acudió al establecimiento para quejarse por un “aparato estropeado”. Sin embargo, su solicitud no fue atendida porque, según le explicaron, “no tenía ningún suministro registrado a su nombre”. Por ello, le recomendaron “efectuar un cambio de titularidad”.
El momento de los hechos
Poco después de las 10 de la mañana de ese lunes, la situación dentro de la oficina, perteneciente a la empresa estatal, transcurría con normalidad. A esa hora, según capturaron las cámaras de seguridad, el atacante entró al lugar tranquilamente con un pico en su posesión.
Una mujer, cercana a la puerta de entrada de vidrio, fue la primera en reaccionar al percatarse del inminente peligro. Inmediatamente, al percibir los primeros golpes dirigidos a las instalaciones, generó alarma entre dos mujeres más, y juntas lograron salir del establecimiento apresuradamente.
Algunas trabajadoras buscaron refugio en la pared que se encontraba opuesta al mostrador principal, rogando por su seguridad. Mientras, las grabaciones de las cámaras evidenciaron cómo un hombre intentó dialogar con el agresor sin éxito.
El individuo agresivo se negó a justificarse o a mantener alguna charla y procedió a destruir, con el pico, parte de los ventanales del frente del local. Apartó a un lado al hombre que lo abordó y continuó con la destrucción.
El dañino acto incluyó la rotura de sistemas de monitores y otros instrumentos de trabajo que pertenecían a los empleados encargados de la atención al público.
El caos generado llevó a las trabajadoras y clientas presentes a salir del sitio. El agresor permaneció solo, incrementando el nivel de destrozo.
Poco después, volvió a intercambiar algunas palabras con el hombre que había intentado calmarlo, antes de abandonar el sitio a pie, luego de un minuto de haber entrado y haber sembrado el miedo y el caos en la oficina de la EPE.
Las autoridades judiciales revisaron las imágenes registradas por las cámaras, lograron identificar al transgresor y agentes de la Policía de la Unidad Regional XVIII procedieron a detenerlo.
El fiscal Diego Rodríguez y Barros ha tomado cartas en el asunto, realizando investigaciones pertinentes que podrían derivar en cargos por daños mayores y amenazas potenciales.
Por su parte, la EPE se encuentra evaluando la magnitud de los daños para iniciar las reparaciones necesarias y reanudar el servicio de atención al cliente.