La controversia detrás de una imagen icónica
Imaginemos si toda una vida de reconocimiento y riquezas hubiera correspondido a otra persona, la persona adecuada. ¿Qué si el crédito de una imagen icónica fuera erróneo intencionadamente? Estas son algunas de las preguntas que plantea “The Stringer”, el documental que sacudió al Festival de Cine de Sundance en Estados Unidos, poniendo en duda la autoría de una de las fotografías más famosas del fotoperiodismo.
El documental que desafía la autoría del legendario fotoperiodismo
“The Stringer”, término que se traduce como “colaborador” en la jerga periodística, es una obra dirigida por Bao Nguyen, un director vietnamita-estadounidense. En este documental, se examinan mediante testimonios y análisis forenses de imágenes y videos de más de 50 años, la fotografía conocida mundialmente como “Napalm Girl”, tomada durante la guerra en Vietnam, supuestamente por Nick Ut, quien disfruta de su fama desde entonces.
La foto famosa bajo escrutinio
La validez de la imagen capturada el 8 de junio de 1972 no está en disputa. La foto muestra a cinco niños huyendo tras un ataque con napalm en Trang Bang, lanzado por fuerzas de Vietnam del Sur apoyadas por Estados Unidos. En el centro de la escena está Phan Thi Kim Phuc, desnuda, luego de que su ropa se quemara con napalm. Llora aterrada y con dolor, con los brazos extendidos.
Un reclamo de justicia
El film se presentó en Salt Lake City, Utah, donde sorprendió la asistencia de Nguyen Thanh Nghe, un veterano fotógrafo militar ahora residente en California, quien sostiene: “Yo tomé esa foto. Es mía. No quiero dinero, sólo justicia”. Narrando su historia con dificultad, Nghe aclara que trabajaba para el ejército de Vietnam del Sur y que realizaba fotografías para vender. En una ocasión, vendió dos rollos de película a la agencia AP, recibiendo 20 dólares y dos rollos de película gratís a cambio de la imagen de la niña desnuda.
En 2023, Kim Phuc, la protagonista de la famosa foto, presentó su libro “Fire Road” junto a Nick Ut, quien ha sido reconocido por la famosa imagen durante décadas.
Si se comprueban las acusaciones del documental, la noticia estremecería al periodismo internacional. “Esa foto es para el fotoperiodismo como La Gioconda para el arte”, comenta Santiago Lyon, involucrado en la producción de The Stringer.
Cuestionamientos serios sobre el crédito del Premio Pulitzer
“The Stringer” pone en tela de juicio la autoría de una probable de las fotos más relevantes del siglo pasado, la cual obtuvo un Premio Pulitzer. Según la investigación, el mérito se asignó al fotógrafo equivocado. El documental apunta que más de 40 testimonios fueron recogidos, cada uno coincidiendo en que Nick Ut no fue el autor de la imagen. Cambiar la historia no será fácil, pero el documental subraya que es necesario corregirla.
Indagaciones y pruebas técnicas
El estudio detrás del documental fue liderado por el periodista Gary Knight de Seven Foundation, una organización comprometida con la libertad de prensa, y recurrió a la empresa francesa Index, especializada en análisis forenses de imágenes, que mediante técnicas de reconstrucción 3D logró demostrar que Nick Ut no se encontraba en el grupo de fotógrafos que capturaron la imagen. Este hallazgo incluye una imagen donde Ut aparece con un casco distintivo, alejado del epicentro de los acontecimientos, un descubrimiento clave que refuerza que él no fue quien tomó la foto.
Knight reflexiona sobre sus investigaciones afirmando que revelan el “corazón de lo más imprescindible en nuestro oficio: la verdad”.
“The Stringer” no solo desafía la autoría de una fotografía, sino que también trata cuestiones de justicia racial y ética periodística, destacando el papel crucial, aunque a menudo ignorado, de los trabajadores independientes que nos proporcionan la información necesaria para entender el mundo.
Reacciones y respuestas de los implicados
En la narrativa, los testimonios de Nick Ut, Kim Phuc, ni de Associated Press (AP) son parte del filme. AP publicó por separado un informe de 20 páginas como respuesta, afirmando que su análisis respalda la versión histórica que acredita a Nick Ut como el autor de la fotografía. Comprenden el valor de revisar cualquier evidencia nueva que pudiera surgir.
Una pregunta persiste, ¿por qué después de 52 años se suscita esta historia? La explicación puede encontrarse en el poder que ejercían las agencias sobre los fotógrafos independientes en Vietnam, por lo que muchos, como Nguyen Thanh Nghe, optaron por el silencio por temor a las consecuencias. Ahora, tras medio siglo, Nghe simplemente clama por que se sepa la verdad.
Carl Robinson, un editor fotográfico de AP en Saigón en 1972, aceptó haber encubierto el verdadero origen de la foto por más de cincuenta años. En el film, cuenta que un superior, el jefe de fotografía Horst Faas, ahora fallecido, fue quien mandó la foto con el nombre de Ut, posiblemente motivado por vínculos personales.
En todo caso, la búsqueda de verdad es lo que debe prevalecer en el periodismo según Knight, recordando las palabras de un colega: “Cuando la verdad es ignorada, la sociedad se corrompe. La verdad debe ser inquebrantable como brújula moral”.