El lunes pasado, la Academia de la Antártida llevó a cabo una ceremonia conmemorativa del Día de la Antártida Argentina en el Buque Museo Corbeta A.R.A “Uruguay”, situado en el dique 4 de Puerto Madero. El evento, dedicado a celebrar los 121 años de presencia continua de Argentina en el continente blanco, incluyó un tributo al primer jefe de la base, el reconocido explorador polar escocés Robert Mossman.
Inicio de la Presencia Argentina en la Antártida
La historia comienza el 22 de febrero de 1904, día en que la enseña nacional argentina ondeó por primera vez en suelo antártico. Hugo Alberto Acuña, un joven argentino de 19 años a cargo de la Estafeta Postal, fue quien izó la bandera en la Isla Laurie del archipiélago de Islas Orcadas, donde hoy opera la Base Orcadas.
En esta histórica misión lo acompañaron Edgard Smula, argentino responsable de la oficina meteorológica; Luciano Valette, un uruguayo convertido en ciudadano argentino que trabajaba en la oficina de zoología; junto a los escoceses Robert Mossman, meteorólogo, y William Smith, cocinero, ambos parte del equipo precursor liderado por el expedicionario William Speirs Bruce.
Este grupo de cinco personas se convirtió en el primero en establecer una residencia permanente en la Antártida, dedicándose a la investigación científica mientras se adaptaban a las duras condiciones bajo la bandera argentina.
Historia de las Instalaciones Iniciales
Los primeros refugios, aunque rudimentarios, fueron originalmente construidos en 1903 por los miembros del equipo de Bruce y Mossman tras su llegada al continente a bordo del barco Scotia. Ese mismo año, negociaron la cesión de estos asentamientos con el entonces presidente Julio Argentino Roca.
Roca formalizó la aceptación mediante el decreto 3.072, firmado el 2 de enero de 1904, que estableció el Observatorio Nacional Magnético y Meteorológico en Omond House, renombrado luego como Base Orcadas, la primera estación permanente en el continente. Un antecedente se dio con la Expedición Antártica Sueca, donde el joven marino argentino José María Sobral, primer argentino en pasar un invierno antártico, fue rescatado en 1903 junto a otros miembros por la Corbeta Uruguay.
“La donación realizada por la Expedición Antártica Nacional Escocesa bajo la dirección de William S. Bruce fue un evento histórico para nuestro país. Este acto permitió que Argentina tomara posesión de la base y estableciera la primera estación permanente en la Antártida, convirtiéndose en un pionero mundial en la instalación de una base de invernada, comenzando una labor científica meteorológica y geomagnética que se ha mantenido hasta hoy”, comentó Julio César Aveggio, vicepresidente de la Academia de la Antártida y veterano retirado de la Guerra de Malvinas, en diálogo con Clarín.
En 1974, a través del Boletín Oficial, se instituyó el 22 de febrero como el Día de la Antártida Argentina por la Ley 20.827, la cual establece que la bandera debe ser izada en edificios públicos y se deben realizar actos que reivindiquen los derechos de soberanía de Argentina sobre el territorio antártico. La relevancia de conmemorar esta fecha se mantiene viva en las instituciones y autoridades antárticas, que participan cada año en esta ceremonia.
Aveggio subrayó que Argentina siempre ha mantenido una clara vocación marítima y antártica desde sus inicios, reflejada en su constante presencia en bases tanto permanentes como temporarias alrededor del mundo. Resaltar esta vocación y su difusión es esencial, pues la Antártida es una de las políticas más duraderas del Estado Nacional, ofreciendo un modelo de cooperación y actividad científica bajo el marco del Sistema del Tratado Antártico.
El ideal de Argentina como nación bicontinental se ha fortalecido a través de diversas leyes, como la 26.651, 27.671 y 26.206. La reafirmación de la soberanía argentina en la región es primordial en el contexto actual, donde otros actores, tanto nacionales como internacionales, también tienen aspiraciones en la zona.
El evento de este año comenzó con el izado del gallardete de la Academia en el mástil y la interpretación del Himno Nacional Argentino. La ceremonia incluyó también la ejecución de “La marcha de la Antártida” del maestro Mastromarino.
Posteriormente, se presentaron cuatro exposiciones: un homenaje a Mossman por parte del secretario de la Academia, Enrique Aramburu, el discurso del capitán e historiador Sebastián Morán representando a la Armada Argentina acerca de la historia antártica, y una exposición del Teniente de Navío Martín Tito del Comando Conjunto Antártico sobre la actualidad de sus operaciones. Julio César Aveggio, en nombre de la Academia, cerró con unas breves palabras de agradecimiento.
MG