La acción de un influyente gremio de educadores que decidió llevar a cabo una huelga en desacuerdo con la propuesta salarial colocó al gobierno de Axel Kicillof en una posición incómoda. Ante esta acción, el gobierno se enfrentó al sindicato disidente, anunció un descuento salarial por el día no trabajado y desestimó la representatividad de la agrupación gremial.
Según lo difundido por Clarín hace unos días, la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB) rechazó en una asamblea de delegados un aumento del 10% dividido en dos etapas, presentado por la provincia, convocando así a la primera huelga de un importante gremio contra una medida del gobernador. En los aproximadamente cinco años y medio de gestión, Kicillof ha enfrentado protestas docentes organizadas por un sector opositor dentro de Suteba, aunque estas han tenido un impacto menor.
En esta ocasión, la situación sería diferente. La FEB, con más de 60 mil miembros, representa cerca del 20% de los docentes estatales de Buenos Aires. Para tratar de minimizar el impacto de la huelga, el ministro de Gobierno, Carlos Bianco, argumentó que la FEB “no es representativa ni mucho menos” del sector educativo.
El único sindicato con más afiliados que la FEB es Suteba, liderado por el autodenominado kirchnerista Roberto Baradel, que cuenta con más de 80 mil integrantes. Esta agrupación aceptó la oferta del gobierno en su reunión de delegados, aunque el ala disidente conocida como “multicolor” participará en el paro este martes.
“Es insuficiente”, “no es adecuado”, declararon desde la FEB. Este sindicato tiene presencia en más de la mitad de los distritos de Buenos Aires y una fuerte influencia en el interior de la provincia. Suteba, de hecho, se originó de la FEB en 1986, formando una nueva organización desde su filial en La Matanza bajo la dirección de la histórica dirigente Mary Sánchez.
En este contexto, Baradel no respaldará la huelga, pero sí participará en la Jornada Nacional de Protesta convocada por la CTA, programada para el jueves 22. Es probable que este día también haya complicaciones en las aulas debido a la ausencia de docentes que asistan a la manifestación en el Ministerio de Economía, en reclamo de fondos retenidos al gobierno provincial.
En la habitual rueda de prensa de los lunes, el ministro de Trabajo, Walter Correa, aclaró que la Provincia descontará el día a los educadores que participen en la huelga del martes. No se especificó si lo mismo ocurrirá con quienes falten el jueves para participar en la convocatoria de la CTA.
La FEB reafirmó su intención de seguir adelante con la huelga y comunicó a través de redes sociales que “el docente tiene derecho a huelga según el artículo 14 bis de la Constitución”. La organización está dirigida por Liliana Olivera, exdocente de escuelas especiales en Suipacha. En los plenarios recientes, comenzó a demandarse una postura más firme ante el gobierno.
Cambio en la alianza estratégica
Hasta ahora, los gremios de docentes y profesores habían aceptado todas las pautas salariales ofrecidas por el gobierno de Buenos Aires. La FEB y Suteba operaban en conjunto, lo que permitía al gobernador mostrar que desde su llegada al cargo en diciembre de 2019, no había tenido paros generales en las escuelas, empezando el ciclo lectivo sin conflictos.
Los educadores componen desde hace tiempo un Frente de Unidad Gremial (FUGD), que ha mantenido hasta ahora un consenso sobre las estrategias para enfrentar las negociaciones salariales. El sindicato de maestros privados, Sadop, y el menor Udocba también forman parte de esta asociación. El alejamiento de la FEB no parece sugerir una fractura en esta coalición. En varias ocasiones, los principales sindicatos han tomado medidas divergentes.
Detalles de la propuesta salarial
Recientemente, la Provincia propuso un incremento salarial del 10%, dividido en dos etapas a pagarse en mayo y julio. Según el esquema propuesto, los aumentos se calcularán sobre los sueldos de marzo de 2025, con un incremento del 6% en mayo, a cobrarse en junio, y un 4% en julio, a cobrarse en agosto.
La propuesta fue validada por el Ministerio de Trabajo y estableció nuevos niveles salariales para algunas categorías. Un maestro recién ingresado recibiría $ 643.057 en mayo y $ 670.210 en julio. Para el mismo puesto con 10 años de experiencia, el salario aumentaría a $ 719.494 y luego a $ 749.547. Profesores con 20 módulos ganarían $ 851.228 en mayo y $ 883.349 en julio. Profesores con 20 módulos y 10 años de servicio recibirían $ 990.931 y $ 1.028.324.
PS
