Adquiere un clásico Ford Falcon y lo accidenta en una rotonda: “No me comparen con Colapinto

“Comentan sobre el famoso Falcon verde, sobre el tonto que no sabe conducir, que me creo Colapinto. Esas cosas que te hacen enfurecer, pero esa no es la gente que me rodea”.

Lucas Hormaechea (45) dialoga con Clarín minutos después de recibir el alta médica en el hospital de Coronel Vidal, luego de un accidente que pudo haber sido fatal. Afortunadamente, solo tiene cortes y algunos golpes.

En las redes sociales, los comentarios sarcásticos no cesan. “Hablan sin saber lo que realmente ocurrió, ni se preguntan si estoy bien o si llevaba a alguien de mi familia”, lamenta. Sin embargo, también recibe mensajes de apoyo y ofertas para ayudar con la reparación del vehículo.

El estado del Ford Falcon antes del incidente

El Ford Falcon en perfecto estado antes del accidente.

“Los que aseguran que me creo Colapinto son simples opinólogos”, explica.

Un fin de semana lleno de emociones

El sábado pasado, Hormaechea acudió a la carrera del Turismo Carretera (TC) en el autódromo Oscar y Juan Gálvez, el emblema del automovilismo argentino, en Buenos Aires. Publicó imágenes de ese día, incluyendo una con Mariano Werner, su ídolo de la automotriz que sigue fervorosamente.

Lucas Hormaechea, ferviente admirador del Ford Falcon, junto a Mariano Werner, el domingo 24 de agosto de 2025 en el autódromo de Buenos Aires.

La adquisición del Falcon soñado

Al día siguiente, lunes, el mecánico se dirigió a Mar del Tuyú para adquirir un Ford Falcon Futura, modelo 1972, extraordinariamente conservado, “con apenas 124.000 kilómetros originales”. Estaba completamente original, con una caja de tercera al volante y un motor de seis cilindros en línea, con 188 pulgadas cúbicas.

Lo compró por “10.000 dólares en efectivo”. Al recogerlo, “estaba guardado en un galpón”.

“Por suerte, esta vez mi familia se quedó en casa y no vino conmigo. Encontré el auto que siempre quise para mi colección, pero al final ocurrió este problema”, reflexiona con resignación.

El Falcon quedó destrozado tras chocar contra un poste de luz, a 30 km de llegar a Mar del Plata.

La pasión por Ford Falcon

Hormaechea es coleccionista de vehículos de esta marca. “Soy un referente, me conocen en La 4 de Ford (NdR: así se refieren a la afición del óvalo). Poseo un Sprint, un parante fino, un Deluxe, y este era el que me faltaba”, indica. También ha poseído modelos de la competencia, como una cupé Chevy y un Chevrolet 400.

Como padre de cuatro hijos, acostumbra a recorrer las rutas con su familia. También organiza eventos caritativos, como los que benefician comedores. El próximo será el 8 de diciembre. “Si te encuentras por aquí, estás más que invitado”, declara.

El coche quedó irreconocible tras el accidente.

“Con un Falcon atravieso toda Argentina: en unos días viajaré a La Pampa, en octubre asistiré a un Nacional en Junín, y hace menos de 20 días estuve en un evento en Termas de Río Hondo. Soy un ícono para los amantes del Falcon”, se enorgullece.

Detalles del accidente

El lunes, mientras retornaba a casa en Mar del Plata, ocurrió el percance hacia las cuatro de la tarde. Fue en la rotonda de entrada a Mar de Cobo, en la ruta provincial 11.

El recorrido de Lucas Hormaechea al autódromo de Termas de Río Hondo, en Santiago del Estero.

“El coche estaba en óptimas condiciones. No fue culpa mía ni por exceso de velocidad, sino que la rotonda estaba cubierta de gasoil”, aclara.

Respecto a la maniobra que culminó en la colisión, explica: “Es una rotonda a cuarenta y cinco grados, lamentablemente al intentar enderezar, el coche se descontroló, reventando un neumático, y al tocar el pasto, fue imposible detenerlo”.

Lucas Hormaechea, participando en la última carrera del TC en Buenos Aires.

El Falcon chocó de lado, en el lado derecho, contra un poste de luz, quedando gravemente dañado.

Quizás también te interese:  Accidente de Claudia Villafañe cerca del estadio riverplatense: causas y su estado actual

“Tengo cortaduras en el brazo, estoy todo cosido, con un golpe en la cabeza, cortes de vidrio en la cara, tres costillas magulladas y las piernas bastante heridas, pero sigo con vida”, asegura.

El Ford Falcon Futura, modelo 1972, adquirido por Lucas Hormaechea en Mar del Tuyú y destruido en el acceso a Mar de Cobo.

El poste le atravesó un brazo, requiriendo al menos ocho puntos de sutura.

“Lamenté mucho por el auto. Era un vehículo que siempre deseé, difícil de encontrar con esos kilómetros y en ese estado. Era como nuevo, sin detalles. Ahora, al verlo destrozado, piensas que es increíble que el conductor haya sobrevivido”, menciona.

Un automóvil más de la colección de Lucas Hormaechea.

Hormaechea, un apasionado de los automóviles clásicos, destaca que había realizado la transferencia a su nombre y que contaba con seguro. “Ahora debo empezar a investigar”, comenta.

Y nuevamente agradece que su familia no estaba en el Falcon, con su habitual optimismo: “Fue una desgracia con suerte, y hoy puedo seguir conectando con personas, como en este momento, que estoy hablando contigo y con la gente del diario Clarín”.

Quizás también te interese:  Funcionario cesado tras afirmar que se investigará accidente en Miami relacionado con nieta de famosa productora argentina

Consciente de su profesión de mecánico, conoce una de las máximas de los siniestros: “Los fierros se arreglan”.

EMJ

Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos y para mostrarte publicidad relacionada con sus preferencias en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Más información
Privacidad