De acuerdo con los últimos datos de inflación del INDEC, en marzo el incremento en los costos de los medicamentos fue del 1,3%. Esto significa que el aumento se situó 2,4 puntos porcentuales por debajo del índice de inflación general, que fue del 3,7%. Sin embargo, hubo diferencias notables entre los fabricantes nacionales y los internacionales, un aspecto que el Gobierno destacó en un momento crítico para las relaciones con el sector farmacéutico.
Informe sobre la evolución de precios en Argentina
Según un reporte de la Dirección Nacional de Economía de la Salud bajo el Ministerio de Salud de la Nación, durante el primer trimestre del año, los precios de medicamentos se mantuvieron estables: un aumento del 1,6% en enero y febrero, y del 1,7% en marzo.
El Ministerio de Salud informó que “este es el décimo mes seguido en que el incremento en los precios de medicamentos es menor que la inflación general. En el primer trimestre de 2025, los precios de estos productos subieron un 5,2%, frente al IPC acumulado del 8,6%”.
El Ministerio, dirigido por Mario Lugones, también centró su atención en los medicamentos de alto coste, un tema en debate debido a la próxima creación de la Agencia Nacional de Evaluación de Financiamiento de Tecnologías Sanitarias (Anefits), cuya misión será determinar qué productos entran al país: “Se notó una ralentización en el incremento, pasando de un 1,9% en enero a un 1,3% en marzo”.
Diferencias en aumentos entre categorías
No obstante, el Ministerio aclaró que esta ralentización no es homogénea entre todas las categorías de medicamentos. “Al observar el origen, se ve que en el primer trimestre los productos locales subieron un 5%, mientras que los importados aumentaron un 6,5%, superando en 1,8 puntos la variación del dólar, que fue del 4,7%”.
La diferencia en los precios de los medicamentos importados no se había detallado en comunicados anteriores, y surge en un momento en que los laboratorios extranjeros intentan evitar que la Anefits obstaculice sus intereses. Principalmente, buscan que el registro en la ANMAT no dependa del juicio de la nueva Agencia, como lo sugiere el plan oficial presente.
En su reciente visita a la Cámara de Diputados, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, discutió el tema y comentó en la red X que la Anefits está encargada de desregular el sistema de salud, eliminando normas obsoletas, estructuras redundantes y criterios arbitrarios. Curiosamente, Francos parece dar por hecho la creación de la Agencia, aunque el decreto oficial y sus detalles aún no se han publicado.
La medición de la variación de los precios de medicamentos se basa en un seguimiento de los precios de venta al público, publicados en manuales farmacéuticos, a partir de una canasta de más de 15.000 productos. “El objetivo es analizar el comportamiento del mercado para ofrecer evidencia sólida que facilite la toma de decisiones estratégicas”, dice un comunicado del Ministerio de Salud.
El conflicto entre el Gobierno y los laboratorios extranjeros es un capítulo más en el intento por controlar el sistema de salud. El año anterior, la disputa fue con las prepagas, lo que incluyó una demanda judicial. Las prepagas son importantes en la financiación de los medicamentos que venden estos laboratorios. Ahora, la atención se centra en los innovadores de nuevos fármacos, ante el temor de que ciertos medicamentos muy avanzados pero costosos puedan ser restringidos en Argentina.
La brecha entre los laboratorios nacionales y extranjeros se parece ampliar con la política de salud oficial. Mientras CILFA, que agrupa a los primeros, está a favor de medidas más abiertas, CAEME, que representa a los foráneos, ha comenzado a manifestar sus reservas de manera pública, algo inusual para su historia reservada.
PS