El sector de la salud mental se remeció debido a la controversia originada por el uso de palabras como “idiota”, “imbécil”, y “débil mental” en una publicación de la Agencia Nacional de Discapacidad dentro del Boletín Oficial. Este incidente ha producido un efecto dominó de consecuencias. Tras el anuncio del Gobierno sobre la revocación de la resolución 187, que integraba estas definiciones ofensivas y discriminatorias en el Anexo 1, se reveló que se había despedido a una empleada de la ANDIS.
Detalles de la desvinculación
Desde el Ministerio de Salud se confirmó que la persona desvinculada fue Miriam Améndola. En realidad, su salida ocurrió antes de que asumiera oficialmente el puesto de coordinadora de Fiscalización Médica en la Agencia Nacional de Discapacidad.
Cambios en el personal de ANDIS
Améndola iba a ocupar el cargo que dejó Tatiana Alvarado, quien estuvo involucrada en la creación del controvertido documento anexo que fue descubierto por Clarín. Sin embargo, Alvarado abandonó el puesto antes de que el texto se publicara. Desde la dirección de la agencia nacional, liderada por Diego Spagnuolo, se responsabilizó a ambas empleadas por el escrito difundido.
Responsabilidad asumida y próximas acciones
Diego (@dspagnuolo_ok) comunicó que las personas responsables de lo sucedido ya fueron separadas de sus cargos en ANDIS.
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